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Hoy recordé algo que mi bisabuela solía hacer.  Era una tarta de nuez con una cantidad absurda de azúcar, pero que sabía a la gloria en cada bocado.  Esa receta se perdió porque ella nunca la quiso compartir xD Pero me dispuse a probar cuantas recetas haga falta hasta lograrla. 

Pensando en eso, recordé también que su casa siempre olía a comida rica.  O eran pastas que te reconfortan de cualquier cosa, o eran sus tortas fritas, crocantes por fuera, esponjosas por dentro, que generaban una sensación de unión en la familia. Mientras los adultos tomaban mates para acompañar esas delicias, los niños correteábamos con un trozo de torta frita en la mano, y en cuanto lo terminábamos volvíamos a buscar más. 
¡Y ni hablar de su carne asada con romero y pimienta! Manjar de los dioses, que tuve la dicha de probar en varias ocasiones.

Pensando en eso, los recuerdos de comida, que desde chico me generan sensaciones indescriptibles, es que decidí tomar la iniciativa de empezar un nuevo tramo en mi vida en cuanto a mi relación con la comida.
Siempre he dicho que la comida es lo que más feliz me hace (en cosas materiales, digo), indudablemente. No puedo evitar sonreír de oreja a oreja y regodearme cuando pruebo algo realmente sabroso. Es un calorcito en el pecho que tiene que ser expresado si o si. Una comida deliciosa debe ser honrada al momento en que ingreaa a mi cuerpo y se vuelve en la fuente de mi dicha.

¿Y en qué consiste esto que quiero empezar pronto? Es simple...
Cada sábado al mediodía quiero hacer una comida que asocie con buenos recuerdos y sensaciones, y llevar un registro de ello. Aún no sé si por escrito, por fotos o videos, pero quiero que quede registrada la constancia, el empeño y el esfuerzo por recuperar y aferrarme a esos buenos recuerdos.
Y quiero hacer extensiva esta idea, a todos mis amigos, conocidos o quien sea que quiera sumarse. 
¿Cómo sería esto? Simple. Si hay una comida, sea salada, dulce, sencilla o comoleja, me mandan un mensaje con el nombre del plato y, si tienen, una receta que les guste. La comparten, y elijen un sábado que les resulte cómodo. Ese día, al mediodía, comemos en casa.
Obviamente, va a ser una persona y una comida por sábado, por lo que pregunten la disponibilidad con anticipación.

Es una forma de revivir buenos recuerdos y momentos, propios y ajenos, y así a la vez generar nuevos recuerdos y momentos en buena compañía.

A quienes me leen, espero feedback de esto, porfa. Por whapp mejor.

Desde ya  gracias.

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